.LA NAVIDAD Y SATURNO
El origen de la Navidad no es para nada cristiano. Como lees en el principio de este artículo, el origen de la Navidad es pagano. La primera vez que podemos oír hablar de las Navidades celebradas el 25 de diciembre (tal y como lo conocemos hoy) surgió casi dos siglos después del nacimiento de cristo por lo que, incluso después del nacimiento del niño Jesús, las Navidades se seguían celebrando en torno a la figura de saturno que los romanos implantaron.
Los romanos celebraban la Saturnalia romana que no era más que un festival que representaba el solsticio de invierno y honraban al dios Saturno. Durante esta fiesta, los romanos se alborotaban y por ello, los pocos cristianos que existían en aquella época, se oponían a estas celebraciones tan descontroladas. De esta manera se dice que la Navidad surgió para sustitur la celebración de Saturno, rey del Sol, que en inglés es “sun”, por lo que se tomó como el nacimiento del hijo de Dios, que en inglés es “son”. Más tarde, cuando la religión cristiana se impuso en todo el Imperio Romano, el rey Justiniano declaró la Navidad como unas fiestas cívicas, aunque poco duró esta compostura, pues en la Edad Media las fiestas navideñas se convirtieron en días para beber y estar de juerga de la mañana a la noche.
De hecho, si miramos costumbres antiguas, puede parecer muy raro celebrar el nacimiento de alguien ya que en los primeros siglos de Iglesia Cristiana, se solía celebrar la muerte de las personas que eran importantes y no sus nacimientos.
También tenemos que observar la siguiente cita para darnos cuenta de que, en realidad, esta festividad no es aceptada en la Biblia.
Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres” (Mat. 15:9). La Navidad no es un mandamiento de Dios — es una tradición de los hombres. Cristo continuó: “Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición. (Marcos 7:9)EL ORIGEN PAGANO DE
La Saturnalia se celebraba cuando el sol estaba más bajo en el cielo y, así, los días se hacían más largos. Eso simbolizaba el crecimiento. Durante esta época se honraba a Saturno, dios del Sol y del fuego. También era relacionado con la agricultura, pues esta necesitaba el sol para poder sembrar y que las cosechas creciesen. El festival de invierno llamaba a este dios del Sol para que volviese y las cosechas siguiesen creciendo.
El planeta Saturno también toma el nombre de este Dios, pues sus anillos y el color rojo marcaban esta asociación.
En el resto de las civilizaciones y culturas, también existía este dios del fuego y del sol. En Egipto lo llamaban Vulcano, los griegos le llamaban Cronos, los babilonios Tamuz (o Nimrod cuando resucita en su hijo) y Moloc o Baal para los druidas. Para ellos, todos estos dioses eran Nimrod, considerado el padre de los dioses babilonios.
Saturno también era considerado un devorador de niños pues, al ser el padre de los dioses, debía tener un caracter intachable. Llevando el nombre de Cronos, cuenta la historia que devoraba a sus hijos según nacían.
Si te estás preguntando por qué consideraban necesario sacrificar a los niños para adorar a este dios, se debe simplemente a que creían al fuego como algo divino que limpiaba los pecados y defectos que se pasaban de manera de generación en generación, por lo que a los niños debían quemarlos para eliminar estas genéticas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario